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En medio de un vuelo, un avión comercial es tomado por terroristas islámicos.
- ¡En el nombre de Alláh, el Dios único y verddero, estrellaremos éste avión y los mataremos a todos ustedes! - grita fúrico el líder.
De pronto, siente un ligero tirón de su camisa. Se trata de un pastor, que con lágrimas en los ojos, le dice:
- Discúlpe, señor, ¿podría por el amor de Dios, demorar nuestras muertes unos minutos y rezar para hacer las pases con Dios? Usted es un hombre de fé, así que estoy seguro de que usted podría apreciar eso, ¿verdad?
- ¡Está bien, carajo! - gruñe el líder musulmán - ¡Cinco minutos! ¡Y entonces estrellaremos ésta mierda!
El avión entonces vuela en círculos durante cinco minutos.
- ¡Se acabó! ¡Es hora de tirar éste avión! ¡Allahú Ákbar! - exclama el terrorista.
Pero entonces, alguien entre los pasajeros levanta su mano. Es un monje budista.
- ¡¿Qué es lo que quieres, pagano de porquería?! - grita cabreado el líder.
- ¿Podría quizás Usted, en un acto de compasión, mantener el avión en vuelo por otros cinco minutos? - dice serenamente el monje - Tan sólo quiero meditar y prepararme para la siguiente vida. Usted es un hombre religioso, estoy seguro de que tomará en consideración mis palabras.
- ¡Está bien! ¡Pero sólo cinco minutos! ¡No más, joder! - grita furibundo el impciente suicida religioso.
Luego de cinco minutos, el terrorista anuncia que se ha terminado el plazo y que es tiempo de colisionar el avión. Y entonces otro psajero levanta la mano. Es un rabino.
- ¡¿Qué es lo que quieres?! - exclama fuera de si el terrorista.
- Este... - contesta el rabino - ¿Nos van a dar millas extras por esto?
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- ¡En el nombre de Alláh, el Dios único y verddero, estrellaremos éste avión y los mataremos a todos ustedes! - grita fúrico el líder.
De pronto, siente un ligero tirón de su camisa. Se trata de un pastor, que con lágrimas en los ojos, le dice:
- Discúlpe, señor, ¿podría por el amor de Dios, demorar nuestras muertes unos minutos y rezar para hacer las pases con Dios? Usted es un hombre de fé, así que estoy seguro de que usted podría apreciar eso, ¿verdad?
- ¡Está bien, carajo! - gruñe el líder musulmán - ¡Cinco minutos! ¡Y entonces estrellaremos ésta mierda!
El avión entonces vuela en círculos durante cinco minutos.
- ¡Se acabó! ¡Es hora de tirar éste avión! ¡Allahú Ákbar! - exclama el terrorista.
Pero entonces, alguien entre los pasajeros levanta su mano. Es un monje budista.
- ¡¿Qué es lo que quieres, pagano de porquería?! - grita cabreado el líder.
- ¿Podría quizás Usted, en un acto de compasión, mantener el avión en vuelo por otros cinco minutos? - dice serenamente el monje - Tan sólo quiero meditar y prepararme para la siguiente vida. Usted es un hombre religioso, estoy seguro de que tomará en consideración mis palabras.
- ¡Está bien! ¡Pero sólo cinco minutos! ¡No más, joder! - grita furibundo el impciente suicida religioso.
Luego de cinco minutos, el terrorista anuncia que se ha terminado el plazo y que es tiempo de colisionar el avión. Y entonces otro psajero levanta la mano. Es un rabino.
- ¡¿Qué es lo que quieres?! - exclama fuera de si el terrorista.
- Este... - contesta el rabino - ¿Nos van a dar millas extras por esto?
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